Para que una empresa tenga el éxito esperado en el mercado laboral, independientemente del sector en el que trabaje, tiene que contar con algunos elementos fundamentales como disponer de una plantilla de trabajadores profesionales y responsables, además de contar con productos y servicios de calidad por un precio justo.
También es muy importante llevar a cabo estrategias de marketing tanto online como a pie de calle para dar a conocer la marca y los productos que se tienen a la venta. Para ello es preciso utilizar las ventajas que ofrece Internet, pues por un coste mínimo es posible captar un mayor número de posibles clientes.
Estos aspectos son imprescindibles para promocionar el negocio pero hay que tener en cuenta otros detalles que pueden perjudicar al funcionamiento y al crecimiento de dicha empresa, como por ejemplo la competencia desleal
La competencia desleal consiste en que una persona, ya sea física o jurídica, actúa de mala fe en contra de una empresa con la única intención de salir beneficiados ellos mismos en el ámbito laboral. Este factor se puede desarrollar por tres grandes motivos: en primer lugar, para crear una empresa de características y funciones similares, actuando a base de engaños y mala fe para conseguir sus objetivos; en segundo lugar, el espionaje industrial, donde los contratados de silencio y otras cláusulas no se tienen en cuenta y se utiliza información privada de una empresa, perjudicándola en diversos aspectos; y, por último, cabe destacar la duplicidad de empleo, debido a que los empleados trabajan para esta empresa, pero también para otros negocios.
A la hora de determinar si se sufre ente tipo de competencia en una empresa es necesario contactar con investigadores privados, quienes recopilarán toda la información y las pruebas oportunas para demostrar que alguien actúa de mala fe contra el negocio.